¿Jugamos unas palas?: el acuerdo de Derecho Colaborativo

¿Jugamos unas palas?: el acuerdo de Derecho Colaborativo

Durante este invierno de 2015 he tenido conmigo en mi despacho a mis palas de playa artesanas. Me han servido para mostrar a compañeros que se han acercado hasta aquí lo que puede ser una práctica de negociación colaborativa frente a una adversarial, y para recordarme que, caso de ser posible, ese es el juego que más me gusta jugar. Más que el tenis, el pádel o el frontón, a mí el deporte que más me convence y con el que más disfruto es con las palas de playa… !qué cosas! (digo esto y me acuerdo de mi tío, el palista, mirándome con lástima cuando dije esto en una comida familiar).

Ahora se acerca el buen tiempo y mis palas han salido del despacho para empezar a bajar a la playa a disfrutar del sol y de los golpes de la pelota. En esto de las palas no estoy sólo, obviamente. Están mis compañeros de juego, con los que llevo mucho años jugando y sólo nos hace falta cruzar una frase y un par de gestos para pasarnos las palas y acercarnos a la orilla a empezar a jugar.

Pero no todo el mundo que se interesa por este juego sabe cómo es y cómo se juega. Es posible que se acerquen personas que desconozcan el funcionamiento del juego. Si les dejas las palas, lo más probable es que jueguen como si de un partido de tenis se tratara. Por esto es muy importante que, antes de empezar el juego, comprender su funcionamiento y, sobre todo, su espíritu cooperativo y colaborativo; con el fin de evitar que nos encontremos jugando a juegos diferentes, mientras uno golpea para facilitar el golpe del otro, éste otro golpea para hacer un tanto imaginario que rompe la dinámica del juego e imposibilita su continuación.

En la práctica del derecho colaborativo ocurre algo similar. Para poder jugar y disfrutar es imprescindible conocer sus reglas, sus principios, sus valores, los papeles y roles de cada interviniente, los plazos, los costes, etc… y mostrar el compromiso con los mismos es algo fundamental.

Los profesionales colaborativos, ya sean abogados o expertos neutrales, reciben ese calificativo no por su talante, sino por haber recibido una formación en la práctica colaborativa bajo unos estándares similares que se fijan a nivel internacional. Esto hace que los profesionales que intervienene en un proceso colaborativo jueguen al mismo juego, con las mismas reglas, principios y valores.

Las personas que se acercan con su problema y conocen el derecho colaborativo no conocen el juego y necesitan ser informados a fin de que, en primer término, decidan si les conviene y, en segundo término, puedan mostrar su compromiso al proceso en la confianza de que todos vamos a jugar al mismo juego y no va a encontrarse con alguien que aprovecha la colaboración para hacer sus tantos.

En este punto, tras esa primera labor informativa, la firma del acuerdo colaborativo, con carácter previo al inicio del proceso, es fundamental.

El acuerdo colaborativo es un contrato que firman tanto los clientes y los profesionales donde se tratan distintas cuestiones sobre las que, necesariamente, ha de existir un compromiso previo al inicio del proceso. Estas cuestiones hacen referencia a los principios del derecho colaborativo, a la labor de los profesionales, a los compromisos de los clientes, a la confidencialidad del proceso, a la trasparencia, a la renuncia de los abogados colaborativos a la vía contenciosa, al papel del experto neutral y a los plazos y costes del proceso.

Y es una vez firmado el acuerdo cuando daremos comienzo al juego, al proceso colaborativo donde se irán alternado reuniones abogado/cliente con reuniones donde estaremos presentes todos los intervinientes del proceso para tarabajar a partir de los intereses y necesidades de las partes, generando opciones, facilitando acuerdos, reformulando posiciones, escuchando, reconociendo al otro, poniendo encima de la mesas nuestras peticiones, etc…, hasta que llegue el momento del cierre y con él, el del refescante chapuzón.

salud !!!

;; orbe

P.D.: Si quieres ampliar información sobre algún aspecto de los aquí tratados puedes escribir un correo electrónico, estamos a tu disposición. Cuanto más jugemos, mejor.

 

 

;; orbe

;; orbe

Hijo, nieto y sobrino de marinos

Enrolar esa tripulación idónea, diversa y diferente para cada viaje en que nos embarquemos; fijar destino, escoger rumbo y zarpar junto con el cliente; esta es la magia de ;; abogacía artesana.